Ningún lector de Hispanidad, para ser exactos ningún ser humano, debería dejar de leer el decreto por el que el Gobierno de Castilla-La Mancha concede a su ex presidente, don José Bono Martínez, ahora ministro de Defensa, la Medalla de Oro de esta comunidad autónoma. Es un texto que define a un hombre, a una institución, a un estilo de Gobierno, a una época

Lo publicamos, señor Bono, sin el menor ánimo de injuria, sin retranca y rechifla, y por ello exigimos a nuestros lectores que no se rían, ni una mínima carcajada, al menos hasta haber leído el texto completo. No se lo pierdan:
 

Presidencia de la Junta

Decreto 71/2004 de 4 de mayo por el que se concede la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha a Don José Bono Martínez.

José Bono Martínez nació el 14 de diciembre de 1950 en Salobre (Albacete) donde aprendió, según sus propias palabras, a comportarse como si todo el mundo fuese lo que es en realidad: igual. Hijo de José y de Amelia. Casado con Ana Rodríguez. Padre de Amelia , Ana, José y Sofía. Amigo de sus amigos y de sus adversarios, porque no se le conocen enemigos.

José Bono, luchador por el restablecimiento de la democracia en España. Abogado, Diputado por Albacete al Congreso entre 1979 y 1983. Ministro de Defensa del Gobierno de España .Y, sobre todo, Presidente de CastillaLa Mancha.

Desde junio de 1983 a abril de 2004, ha sido Presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha. El presidente Bono.

Castilla-La Mancha surge como región al amparo soberano de la Constitución de 1978 y de su Estatuto de Autonomía. Sin embargo, fue a partir de las primeras elecciones autonómicas de 1983 cuando los castellano-manchegos comienzan a tomar conciencia de las posibilidades de la autonomía política.

Nuestra Región, con un líder al frente, emprendió una ardua marcha hacia un esperanzador futuro, abandonando el equipaje de un pasado sombrío.

Bono, como el caminante de Antonio Machado, hizo camino al andar. Hizo Castilla-La Mancha, hizo castellano-manchegos, consolidó la Región y la defendió con acierto.

Si somos los que nos atrevemos a soñar, hoy Castilla-La Mancha es una realidad preñada de futuro porque un gran cumplidor de sueños se puso en marcha en 1983.

Pero de manera realista, no iluminada. De forma inteligentemente pragmática, no voluntarista.

Bono ha hecho realidad un sueño contando con todos. Con Don Quijote y Sncho. Con el cura y el barbero. Con el ventero y el cabrero. Con Dulcinea y la sobrina.

Todo para Castilla-La Macha, pero con Castilla-La Mancha. Porque despotismo, ni siquiera ilustrado.

Los méritos por los que se le reconoce acreedor a la distinción que hoy se le otorga son muchos, imposibles de sintetizar en el texto de un Decreto que ha de ser breve. Pero en Castilla-La Mancha somos bien nacidos y, por lo tanto, agradecidos. Y ahora, el Gobierno de la Región, recogiendo el sentir del conjunto de la población, al conceder la Medalla de Oro a José Bono, le dice, sencillamente, gracias.

Gracias por 21 años de pasión y trabajo. Gracias por 21 años de amistad, porque Bono, y este es quizás su mayor bagaje, ha conseguido durante su presidencia amistades para siempre, sin distinción de clase social, ideología o edad, en todos y en cada uno de los municipios de Castilla-La Mancha.

Hoy hay toda una generación muy distinta a la de 1983. Una generación que tiene Universidad, una generación que tiene mejores comunicaciones, una generación con mayor bienestar. Una generación mejor preparada para construir su propio futuro. Un generación Bono que ha crecido y ha madurado paralelamente a su Presidencia.

Por todo ello, y por tantas cosas que todos guardamos en la memoria, con el convencimiento de que sin él no seríamos lo que somos, el Gobierno de Castilla-La Mancha le concede su máxima distinción, sabiendo que no hay medalla que pueda hacerse de aleación de cariño, amistad y agradecimiento con la que, simbólicamente, está hecha la Medalla de Oro que este Decreto concede.

En consecuencia, por todos estos méritos, previa deliberación del Consejo de Giobierno en su reunión del día cuatro de mayo de dos mil cuatro, y a propuesta de su Presidente.

Dispongo

Artículo único

Se concede la Medalla de Oro de Castilla-La Mancha a Don José Bono Martínez, en reconocimiento a su dilatado y prestigioso trabajo como Presidente de Castilla-La Mancha y por los servicios prestados a los intereses generales de esta tierra durante veintiún años.

Disposición final

El presente Decreto entrará en vigor el mismo día de su publicación en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha.

Dado en Toledo, a 4 de mayo de 2004.

José María Barreda Fontes