Sr. Director:
Es lamentable que la cabeza visible del FMI (Fondo Monetario Internacional), el socialista francés Dominique Strauss-Khan, se vea envuelto en asuntos de este tipo y tan poco relacionados con sus obligaciones como gran economista.

 

Precisamente en estos momentos, pues se podía imaginarse una circunstancia más inadecuada en la atmósfera de turbulencia económica global que un asunto de tan turbia naturaleza, afectando directamente al director-gerente del Fondo Monetario Internacional.

Sin que se puedan prejuzgar los resultados de la investigación o las eventuales consecuencias jurídicas, la prudencia aconsejaría acelerar los preparativos de la sucesión a la cabeza del FMI, si él no tiene la gallardía, que procediendo de donde procede y el tipo de tropelías en las que cae no cabe esperar que la tenga, de dimitir.

Y es que cuando un hombre no actúa como hombre maduro y formado, cuando no se está a la altura, puede acabar actuando como Dominique Strauss-Khan.

Domingo Martínez Madrid