El director general de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA), José Antonio Olavarrieta, presentó este jueves el balance de las cajas españolas en 2008. El ejercicio se destacó por un descenso del beneficio del 38,7% con respecto al anterior.
Sin embargo, en el año de la crisis CECA informa de un incremento en la dotación a provisiones del 31,8% hasta 694 millones. Las pérdidas por deterioro de activos aumentaron un 70% hasta 9.303 millones. Sin embargo, la morosidad de las cajas se ha multiplicado por cuatro, ya que en 2008 fue del 3,79%. Si las provisiones sirven para hacer frente a la mora, las cifras parecen desproporcionadas.