El domingo, ZP hizo un viaje sorpresa a Barcelona y pidió perdón por los errores cometidos por su Gobierno, pero mantendrá a su ministra de Fomento

Ni un ápice de autocrítica en la vicepresidenta. A pesar de que Rubalcaba reconoce que ha habido errores de comunicación, De la Vega elude hacer autocrítica. Ni siquiera comunicativa. "Si hay que hacerla se hará; no sería la primera vez". ¿No? Por lo demás, el Gobierno ya no sabe dónde meterse ante el fiasco de las infraestructuras en Cataluña. "Palabras, no; hechos, sí", era el lema electoral de Montilla. ¡Menuda paradoja! Precisamente este viernes se vuelve a caer un arcén del tren.

Y la ministra sin aparecer. ¿Por qué no va a Barcelona?, le pregunta a la vicepresidenta. "Yo no tengo la agenda de la ministra", responde De la Vega. Vamos, que no va porque no está dispuesta a que la abucheen. Para eso está el secretario de Estado de Infraestructuras, Víctor Morlán, que ya ha fijado su residencia en Barcelona.

Por lo demás, De la Vega ha desarrollado una curiosa teoría para proteger a ‘Lady Aviaco'. Por cierto que fuentes de Moncloa aseguran que ‘Mandatela' va a seguir al frente de su ministerio. "No es responsable abandonar el cargo en mitad de los problemas", aseguran dichas fuentes. Por su parte, De la Vega no responde cuando le preguntan si ‘Mandatela' ha presentado su dimisión.

En su opinión, De la Vega afirma que un Gobierno responsable debe de "responder". Y en su opinión, eso es lo que va a hacer el presidente del Gobierno el próximo miércoles en el Congreso. "Va a responder, dar información, dar la cara". Después, según la ‘vice' vienen las soluciones. Vale. ¿Cómo? "Lo primero la seguridad, luego reestablecer Cercanías y después, que el AVE llegue cuanto antes". ¿Cuándo? "No hay fecha".   Tuvo que ser el propio ZP quien viajara por sorpresa a Barcelona el domingo por la mañana y pidiera perdón por los errores de su Gobierno, aunque no anunció el cese de su ministra de Fomento, que prosigue tan bravucona como siempre. El jefe de la oposición, Mariano Rajoy, recordó que ZP ha viajado en domingo,  "no en lunes o martes", es decir, en día laboral, cuando se produce el caos circulatorio en Barcelona como consecuencia de los errores a los que aludía Zapatero.