Sale al paso al intento de cerrar el goteo de objeciones por parte de los religiosos de la enseñanza

Tras la circular remitida la semana pasada por FERE Madrid, los tres obispos de Madrid (Mons. Rouco, Mons. Catalán y Mons. López de Andújar) han remitido este martes una instrucción a los centros católicos en relación a la polémica asignatura de Educación para la Ciudadanía (EpC).

En dicha instrucción se señala claramente que EpC es contraria a la Doctrina de la Iglesia por el "relativismo moral y la ideología de género". Más claro, agua. Así pues, conmina a los centros católicos ubicados en las diócesis de Madrid, Getafe y Alcalá de Henares a que informen "inequívocamente" a los padres y profesores de la contradicción entre los contenidos de los Reales Decretos que desarrollan EpC y la Doctrina Social de la Iglesia. Nada que ver con la ambigüedad de la FERE.

Y sobre la objeción, tres cuartas partes de lo mismo. Los obispos madrileños consideran que "se puede recurrir a todos los medios legítimos para defender la libertad de conciencia y de enseñanza" sin excluir la objeción de conciencia. Además, instan a los centros católicos de la región a que faciliten a los padres el ejercicio del derecho a la objeción de conciencia, en abierta contradicción con la circular de los religiosos de la enseñanza en la que daban por cerradas las objeciones remitidas hasta la fecha de inicio de curso "por razones organizativas y de conciencia".

La instrucción pastoral insiste en que los centros católicos que imparten la asignatura lo hacen obligados "por imperativo legal puesto que se trata de una asignatura contraria a la Doctrina de la Iglesia y por tanto al carácter propio de los centros". Obedecen, porque no les queda más remedio. Por último, los obispos madrileños señalan que las asociaciones de la Iglesia ayudarán a los alumnos de la escuela pública a ser educados "conforme a sus convicciones morales y religiosas".