El ‘president' soñaba con un ‘hub' en la terminal Sur de El Prat

Ya hemos contado que cuando Spanair se puso a la venta, los socios Gonzalo Pascual y Gerardo Díaz Ferrán acudieron a la compra. La sueca SAS les dijo que no los quería. Asunto zanjado. No los quería porque habían sido socios y habían acabado tarifados. Así que con el cartel de ‘Se Vende' la compañía se colocaba en mercado.

Entonces fue cuando Iberia hizo amago de interesarse por la compañía. Y esta vez fue Montilla quien vetó la operación. ¿Por qué? Porque el muy nacionalista de Montilla soñaba con que la terminal Sur del aeropuerto de El Prat pudiera funcionar como un gran ‘hub' catalanista. Y es, obviamente incompatible con una Iberia que los catalanistas observan como "nacionalista española". Así que la operación se frustró. Los catalanistas de todos los partidos soñaban con que fuera Lufhtansa. Pero la alemana -con toda lógica- decía que su ‘hub' era Francfurt. Los de ERC dijeron entonces que Vueling, una empresa catalana podía hacer las veces. Pero Vueling no tiene ni infraestructura ni capacidad financiera ni operativa para semejante inversión. Así que unos por otros, la casa sin barrer.