España ha ganado en confianza y en fiabilidad porque se enfrentó con una encrucijada casi imposible en la que el Gobierno diseñó el rumbo correcto.
El Plan Presupuestario para 2014 de las administraciones públicas, que se ha enviado a Bruselas, persevera en ese camino para asegurar el objetivo de la consolidación fiscal.
El documento prevé que las CCAA ajusten más de 8.000 millones entre 2014 y 2015 y ahorros considerables en empleo público y pensiones.
El plan es creíble y realista. Sólo así se alcanzarán las metas.
José Morales Martín