De la Vega se hace un lío con la transparencia del Fondo de rescate bancario
No hay claridad ni transparencia en la transparencia (valga la redundancia) del Fondo de hasta 50.000 millones de euros de rescate bancario. Bajo el argumento de no dañar el riesgo reputacional de las entidades ayudadas, el fondo será opaco. Se informará al Congreso cada dos meses. Se les dirá cuánto se ha invertido y en qué tipo de activos, pero de qué entidad han sido adquiridos.
Aún así, De la Vega asegura a Hispanidad que cada dos meses se sabrá todo. Estate tranquilo que se va a saber todo
- Ya, pero el reglamento no dice eso
- La transparencia está asegurada, se sabrá todo insiste
- ¿Pero cuándo? ¿Cada dos meses? ¿Con las comparecencias parlamentarias?
- Cuando se razonable y prudente
- Y eso, ¿cuándo es? ¿Cinco años?
- No, menos
- ¿Dos meses?
- Cuando sea prudente y razonable
De la Vega no sale de su propaganda. Pero sigue sin informar de cómo se gestionará la transparencia del Fondo. El asunto es extraordinariamente peligroso. Porque de mantenerse el texto del reglamento tal y como se contempla en el borrador, eso significaría que el Gobierno tendría vía libre para realizar lo que viniera en gana con 50.000 millones de euros de los contribuyentes. O sea, su dinero y el mío.
Y sobre todo, cualquier intento de transparencia en una sociedad de la información como la nuestra, es vano. Finalmente se terminarán por filtrar algunas operaciones y se caerá en el reino del rumor, mucho más dañino que el streptease financiero. Así que el Gobierno se equivoca doblemente. Y lo peor: no es el único. También Berlusconi quiere tener vía libre para el salvamento. ¿O son los bancos a los que no les gusta la luz ni los taquígrafos?