Peligro de eternización del líder sandinista

 

El IV Congreso sandinista aprueba la candidatura de Daniel Ortega a la presidencia de Nicaragua. Las elecciones tendrán lugar en el mes de noviembre.

Siguiendo los pasos que antes dieron Hugo Chávez y que intentó el ex presidente de Honduras, Manuel Zelaya, también Daniel Ortega en Nicaragua quiere eternizarse en el poder. Pese a que la Constitución nicaragüense prohíbe la reelección de los presidentes, Daniel Ortega ya consiguió una sentencia de magistrados orteguistas que le abrió esa posibilidad.

Sin embargo, desde la Iglesia católica, en voz del obispo auxiliar de Managua, Silvio José Báez, se ha criticado que lo ilegal se quiera revestir de legalidad. Tal y como ha manifestado, el Estado de Derecho está hecho pedazos, hecho añicos, ya que los nicaragüenses no han sido capaces, hasta el momento, de evitar la inconstitucional candidatura de Ortega.

De esta manera los obispos lo único que quieren es ofrecer luz desde la verdad y la justicia que vienen del Evangelio y la sabiduría de la Iglesia en su magisterio social, para ayudarle a la razón política a que vaya más allá de lo que entenebrecida por el pecado y las ambiciones ya no puede. Además, se teme que se pueda repetir algo parecido a lo que se está viviendo en Venezuela donde, en defensa de los supuestos intereses del país, el presidente Chávez se ha perpetuado en el poder, o que se produzca una situación semejante a la que vivió Honduras con el intento de Manuel Zelaya de ser reelegido, en contra de lo marcado por la Constitución.

Andrés Velázquez

andres@hispanidad.com