Parece como si los mercados bursátiles estuviesen deseando recibir malas noticias. Así, durante la mañana del lunes 25, todas las bolsas europeas comenzaron con fuertes bajadas.
La causa, como siempre, era un nuevo récord del precio del crudo. Así, el petróleo Brent (Europa) se pagaba durante la mañana del lunes a 51,7 dólares. Y, como también viene siendo normal, el euro marcaba un nuevo récord en el mercado de divisas de Francfort. Antes de que los brokers se fueran a almorzar, por un euro te daban 1,28 dólares, cerca del récord histórico (1,29) que se alcanzó en febrero pasado.
Las explicaciones surgen a posteriori. En este caso, se apuntaba a las dificultades de producción en Nigeria, pero cualquier otra excusa hubiese sido acertada, tuviera como origen Nigeria, Venezuela, Irán o cualquier otro país de los grandes productores.