Oficialmente Vodafone lo niega todo, que no en vano la multinacional angloamericana se debate en un duro dilema interno en mantenerse como está (en sólo móvil) o entrar en la telefonía fija, que sigue siendo la base de Internet. Ninguna otra decisión puede resultar tan estratégica como esta.
Sin embargo, el futuro, parece claro, está en el cuádruple. Es decir, en poder ofrecer una oferta integral de comunicaciones que abarque los cuatro factores: telefonía fija, móvil, Internet (por banda ancha, claro esta) y televisión.
Pero ONO, el monopolio de cable en España que lidera Eugenio Galdón prepara el Cuádruple. Es más, está empeñado en se el primero. El problema es que ONO posee TV, posee telefonía fija, posee banda ancha, y aunque no cubre toda España sino que cablea el país poco a poco, puede presumir de que sólo le falta el móvil. Ahora bien desde que entró en vigor la normativa sobre móviles virtuales, bien pudiera alquilarle la red a Vodafone. Eso es lo que están intentando.