• Caixabank, Popular y Sabadell, los más duros con Damm.
  • Además, el administrador judicial, Deloitte, ya tiene el plan B de los bancos para prescindir de Damm.
  • Dos días de negociaciones no han movido a las partes: los bancos siguen exigiendo lo ya acordado con Damm: 1.000 millones en metálico, a descontar de la deuda.
  • Sin embargo, Juan Manuel Urgoiti insiste en los 700.
  • Y la Xunta, tranquila: el plan B le asegura la continuidad de Pescanova, incluso sin venta de filiales.

Cuarenta y ocho horas de negociación entre el presidente de Pescanova, Juan Manuel Urgoiti, que representa a Demetrio Carceller (en la imagen), no han servido para nada. Las posturas siguen encalladas Y lo peor es que la banca acreedora, especialmente Caixabank, Popular y Sabadell, han convertido la negociación en una cuestión de confianza. Vamos, que ya no se fían de Carceller. Y cuando no hay confianza es inútil hablar de cifras. Antes era  el BBVA el más cabreado, e incluso amenazaba con marcharse, como hizo el Santander.

Pero ahora son las dos entidades catalanas, Caixabank y Sabadell, quienes se sienten engañados. Y el Popular les apoya. No olvidemos que entre los bancos acreedores controlan el 45% de los votos

La historia sigue donde empezó. De los más de 3.000 millones de deuda bancaria, el grupo Damm de Demetrio Carceller acordó con la banca acreedora aportar 1.000 millones, pero luego, cuando se comprobaron los papeles, resultó que sólo se habían comprometido a 700. La banca se sintió engañada y, como ya explicara Hispanidad, presentó un plan B al administrador judicial Deloitte, es decir, al juez.

De esta forma, si el día 15 no hay acuerdo entre la banca y Carceller -y apenas quedan días hábiles- Pescanova podría entrar en liquidación. La banca se haría con el control de la sociedad y nombraría un consejero delegado, que sería, probablemente, el que ya apuntara Hispanidad: Senén Touzá.

Como advirtiera a este diario digital el presidente del Sabadell, Josep Oliú, "no necesitamos un socio industrial, necesitamos un consejero delegado".

¿Y qué piensa la Xunta de Galicia, del señor Núñez Feijóo Sin problemas, es más, casi contenta, porque resulta que en el plan de la banca no se venden filiales, especialmente las iberoamericanas y la de acuicultura. En el plan de Damm, sí.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com