Vueling se convirtió en la aerolínea de bandera del catalanismo… hasta su derrumbe bursátil

Cuando Iberia tuvo problemas en el aeropuerto barcelonés de El Prat, los diputados de CIU y ERC dijeron que Vueling debería sustituir a Iberia como principal operador del "hub" catalán.

El problema es que Vueling se hundía en bolsa, justo cuando vencía el compromiso de una serie de accionistas principales y de un grupo de directivos, aunque, naturalmente, la CNMV no se ha enterado de nada. Por otra parte, la aerolínea no remonta y su futuro se muestra oscuro.

Al mismo tiempo, y aunque recientemente enviara una carta a Hispanidad asegurando que estaba enamorado del proyecto, este periódico insiste en que el presidente de Vueling, José Miguel Abad, quiere marcharse.

Pues bien, en esas llega Planeta, principal accionista de Vueling, y le ofrece al ex presidente del PP en Cataluña la Presidencia de la entidad. Podría ser un regalo envenenado, pero lo cierto es que el propio dimitido no deja de emitir rumores: que si a una constructora (por ejemplo a FCC), que si a Vueling. Vamos, que está en el paro.