Sr. Director:
Propongo que se hagan elecciones con más frecuencia. Durante las semanas previas, se terminan muchas obras públicas pendientes para poderse inaugurar durante la campaña electoral.
Todos los candidatos, además de prometernos el "oro y el moro", se muestran simpáticos y como si fueran amigos nuestros de toda la vida. Se prometen todo tipo de ayudas a la familia y las mejoras sociales que necesitamos. Y encima, en cada elección se nos rebajan los impuestos. Aunque sólo se cumplieran la mitad de las promesas que nos hacen, el país, las comunidades autónomas, las ciudades, las familias y los ciudadanos, mejoraríamos una barbaridad. Y además, e dependientemente de quien consiga formar Gobierno, que ese es otro tema, al final todos los partidos salen ganadores.Hablando en serio; pienso que hacer todo este tipo de promesas, sólo es admisible si van acompañadas del compromiso formal de dimitir, si en un tiempo determinado no las han cumplido. Y todo lo que no sea eso, a mí particularmente, me suena a música celestial. Pero por lo visto hay mucha gente a la que le gusta este tipo de música.
Rut Pardo Collado
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