Y libertad religiosa supone cristianización. Sólo en la idiotizada Europa, dedicada a abjurar de sus orígenes cristianos, hay quien no ve la relación entre cristianismo y libertad y entre cristianismo y justicia social.

Las protestas se extienden en todo el mundo árabe, Reconozco que me han pillado por sorpresa. Egipto, Túnez, Argelia, Yemen, Jordania, Líbano y hasta Arabia Saudí andan en algaradas. Mientras, continúan las matanzas en Irak y sólo Irán, donde la oposición fuera aplastada tras las últimas elecciones, se mantiene en calma. El mundo islámico no el mundo árabe, sino el islámico- ha entrado en ebullición cuando nadie lo esperaba.

Como soy poco amigo de la estabilidad no hay estabilidad más perfecta que la de los cementerios- no puedo ver con malos ojos las revueltas en un mundo cerrado, liberticida y fanatizado.

Ahora bien, de las tiranías del Magreb y de Oriente Medio, así como de la península arábiga, se puede salir hacia el fundamentalismo islámico o hacia algo parecido a una democracia. Y se trata de salir en esta dirección. Si los fanáticos triunfan entonces

Además, Si Egipto cae en manos fundamentalistas y Jordania también Israel perderá sus dos defensas, al este y al suroeste. E Israel donde desgraciadamente también está cundiendo el nacionalismo exacerbado- no permitirá que caiga el Tercer Templo sin dar batalla, y podría tratarse de una batalla nuclear.

En Egipto, la figura de Mohamed El Baradei, premio Nóbel y famoso director general de la Agencia Internacional de Energía atómica (AIEA), aparece como la esperanza de quienes desean el fin del tirano Mubarak y desean, también, que los temidos Hermanos Musulmanes no lleguen al poder. El Baradei no es una garantía de libertad religiosa es musulmán y evita cualquier toma de postura respecto al cristianismo- pero al menos parece la mejor alternativa planteada. Eso sí, me hubiera quedado más tranquilo si hubiera condenado el asesinato de una veintena de cristianos.   

En cualquier caso, el problema del Islam es éste: no acepta la libertad religiosa, y sin esta libertad no pueden darse las demás. Occidente tiene ahora la facultad de promover el respeto a los cristianos en el mundo musulmán. Resultaría un poco estúpido no aprovechar la oportunidad, ¿verdad, señor Obama?

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com