La leyenda negra de la Conquista de América fue creada por españoles, que somos así de bobos, y por los herejes luteranos y británicos, enemigos de la Iglesia de Roma, que veían en España un baluarte de la Iglesia (es que en aquellos tiempos España era otra cosa, oiga usted).

La actual leyenda negra española está creada por economistas norteamericanos recriados en estadísticas europeas, por el eje París-Berlín, que pretende controlar la Unión Europea, por los británicos, que han fracasado rotundamente en sus bancos, precisamente el único agente económico del que se sienten orgullosos.

Pero ninguna leyenda negra tiene la menor posibilidad de éxito si no cuenta con una quinta columna, la del pesimismo patrio, unida a los fallos internos, en este caso a un presidente del Gobierno que pasará a la historia de España por una mezcla curiosa de resentimiento y negligencia.

Lo ocurrido el jueves con el Santander es definitivo. El grupo de Emilio Botín presentó unos excelentes resultados pero su cotización se derrumbó. La suya y la de toda la banca española, y de paso la bolsa entera.

ZP debe irse. Si no quiere convocar elecciones que sea un socialista quien tome los mandos. Cualquiera menos él. Es lógico que el PP pida elecciones, pero ahora debe hacer otra cosa: debe arrimarse a los sectores del PSOE que también piden que se vaya, para presionar juntos a un presidente quemado y ridiculizado pero empecinado. Empecinado, no sólo en conducirnos a la ruina económica, sino en aniquilar a sus enemigos: a los cristianos, a los provida, a la familia, a la derecha Ahora se ha empeñado en liquidar la enseñanza concertada. Y como es un insensato, aunque estemos al borde del abismo económico, lo hará. Él es así.

¡Que se vaya!  Mientras continúe, la nueva leyenda negra encontrará terreno fértil y abonado para expandirse.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com