El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ha roto su línea zigzagueante sobre el aborto. Aprovechando el Día de los Santos Inocentes, Rajoy ha prometido que suprimirá todo tipo de aborto en España: "Basta ya de equívocos acerca de mi actitud personal y la de mi partido sobre ese asunto: el aborto es un crimen, no un derecho, y como tal volverá a ser perseguido en España".
Eso sí, "para ayudar a las mujeres embarazadas en apuros", además de para aliviar la decaída natalidad española, el Gobierno del PP instaurará en España el salario maternal, es decir, una prestación pública para toda española que decida tener un hijo, equiparable al salario mínimo interprofesional".Andrés Velázquez
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