El PP llegó al poder un 20 de noviembre de 2011, con mayoría absoluta. Tras el desastre Zapatero, los españoles apoyaron con entusiasmo el cambio. Si entonces Mariano Rajoy (en la imagen), en lugar de reformitas, hubiera hecho reformas, tan duras como necesarias, y hubiera apostado por la pequeña propiedad privada, especialmente por los emprendedores, así como reducir de forma dura el tamaño del Estado y las prestaciones y, sobre todo, subvenciones, públicas, todo el mundo lo habría entendido.
Podía haber cambiado cuotas laborales por IVA, podría haber reducido impuestos a la inversión, podía haber doblegado a las derrochonas comunidades autónomas, reducido el papel del Estado a la mínima expresión.
Ahora, 16 meses después, con un fracaso absoluto, Rajoy ha perdido un año clave pero no su obcecación por 'sostenella y no enmendalla': más impuestos.
¿Cuánto tiempo cree que va a aguantar a este ritmo la población española ¿Cuánto tiempo puede aguantar el país la extorsión de los mercados financieros y de Berlín-Bruselas
Eulogio López
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