Pedro J. Ramírez, en la COPE; también se refería a la celebración ayer de la Diada en Cataluña: En el momento solemne de la ofrenda del partido socialista de Cataluña en la que se conmemora el enfrentamiento militar de Cataluña contra España, a la hora de elegir el mensaje que su representación transmite, tiene gracia que ahí se hable de libertad de expresión cuando se dirige todo tipo de improperios, para entrar en la subasta de a ver quién es más nacionalista catalán. A ver quién es más antiespañol, y encima eligiendo como cauce de esa expresión antiespañola unas manifestaciones groseras hasta decir basta. Creo que es un escándalo político de primera magnitud.
Y proseguía Pedro J: No podían haber acudido las juventudes socialistas con esa pancarta sin el consentimiento de la cúpula de los socialistas catalanes. ¿Qué pensarían si el PP acudiera arropando, enorgulleciéndose, del mensaje de un ciudadano que en Telemadrid hubiera dicho esas cosas contra Cataluña? Lo que dio de sí que unos militantes del PP dijeran aquello de Pujol, enano, habla castellano. Y aquí, en primera fila, el ministro del Gobierno de España, el líder del partido, Manuela de Madre y estas dos criaturas con el Tots som Rubianes. Significa asumir las manifestaciones de Rubianes. ¿Podéis imaginar lo que sucedería en EEUU, en Gran Bretaña, en Francia, en Italia, en cualquier democracia que una parte del partido del Gobierno asumiera públicamente un mensaje como el de este fulano?, ¿por qué no pone tots som Boadella, Arcadi Espada o Rajoy? Porque Rubianes va a estrenar en Madrid. En otros lugares estaría en el banquillo de los acusados. Yo me alegro de que España sea un estado constitucional con un límite muy alto de libertad de expresión. Pero una cosa es que no queramos que le metan en el trullo y otra la exaltación de estas cosas.