Pedro J. Ramírez, en la COPE, comentaba el proceso : hemos llegado un punto neurálgico de la polémica del proceso. Entre lo que ocurrió en la cumbre en la que no se habló del asunto, a la que no acudió Sarkozi, y lo que ha ocurrido ayer cuando un responsable de la policía francesa ha atribuido el robo a ETA y explicado que se ha producido en el contexto de una actividad sostenida, ha quedado en evidencia que Francia está en contra de lo que está haciendo Zapatero. Y se comprende. A Francia no le va mal con que España tenga que soportar los asesinatos de ETA y los atentados y le va a venir mucho peor si hubiera un entendimiento entre el gobierno de España y ETA porque eso supondría un incremento de la presión sobre el País Vasco francés. Al margen de las cuestiones morales, aquí lo que se percibe es la soledad en la que está afrontando el proceso Zapatero : no cuenta ni con el apoyo de Francia ni con el de media España, por no haber sido capaz de mantener el apoyo del PP. Rajoy se queja de que había sido leal y que Zapatero le engañó y tenía razón. A dónde va Zapatero en una situación en la que cuanto más débil esté, son más fuertes sus antagonistas. Está en una senda que sólo tiene un final, abrazarse con ETA. El sondeo del CIS refleja que hay una parte muy importante de los españoles que tiene dudas, como dijo Blanco.