El ministro de Educación comunicó a los consejeros autonómicos las medidas de ahorro del Gobierno en materia de Educación.
Entre éstas destaca aumentar un 20% el límite de alumnos por aula y fijar en 25 las horas lectivas del profesorado de primaria y en 20 las de ESO. Los recortes -necesarios para, en palabras de Wert, "poner a salvo" la educación pública- cumplen el objetivo de no perjudicar ni la calidad ni la equidad en las aulas e incluso podrían servir de revulsivo y reactivar un sistema educativo que urge reformar en profundidad.
Jesús Martínez Madrid