Fue ministro de Sanidad en el primer Gobierno del PP y creador de la Comisión Nacional de Reproducción Asistida (CNRA), conocida como "Comisión Dexeus", por la presencia de representantes de la clínica catalana en la "independiente". Después ocupó la Presidencia del Consejo de Estado, de donde el PSOE le ha descabalgado con urgencia. Actualmente, dedica sus esfuerzos a fabricar billetes del Banco Central Europeo (BCE) desde su despacho profesional. Pero, en sus ratos libres, sigue vinculado a la política.

 

Entre sus últimas ocupaciones por la "res publica" se encuentra un informe en el que José Manuel Romay Beccaría propone al actual secretario general del PP, Mariano Rajoy, un "aggiornamento" del partido. "Si el PP quiere regresar a La Moncloa debe de abandonar su empecinada oposición a la ampliación de los supuestos despenalizadores del aborto", señala el informe. ¡Toma peaje!

 

Además, Beccaría también apuesta por que el PP defienda la legalización del mal llamado "matrimonio homosexual" y por el apoyo a la investigación embrionaria. Todo muy "light". Y es que -argumenta- "la sociedad ha cambiado y el partido debe de cambiar con ella". No es el primer papel en este sentido. Y probablemente tampoco será el último. Se trata de un movimiento en el que el PP puede pasar de los complejos a la asunción ideológica de la cultura de la muerte.

 

Resulta curioso este tránsito cuando, precisamente, el PSOE comienza a plantear el aborto como "la última opción" para los embarazos no deseados. "Cuando tú vas, yo vengo de ahí, cuando yo voy, todavía estás ahí...".