- Pero a Feijóo no le gusta. Sabe que eso sería dejar a la pesquera gallega en manos de su competidor alemán, Oetker.
- Pescanova se convertido en un test sobre la deslocalización empresarial.
- Y encima, los Masaveu apoyan a Damm.
- Tras quebrar el Banco Gallego, Juan Manuel Urgoiti no parece el más indicado para reflotar Pescanova.
A medida que nos acercamos al jueves 12 de septiembre, los movimientos de los candidatos a quedarse con Pescanova se intensifican. Ese día, la junta general extraordinaria de accionistas decidirá quién se queda al frente de la multinacional gallega. Casi nada.
Pero, a día de hoy, ¿quiénes son los accionistas de referencia Según consta en la CNMV, el principal es el expresidente, Manuel Fernández de Sousa, que mantiene su 7,51% de la compañía. Le sigue la empresa Damm (6,2%), cuyo presidente es Demetrio Carceller (en la imagen), cuyo socio principal es, a su vez, el gigante alemán de la alimentación, Oetker.
Más accionistas de referencia: a Damm le siguen los fondos Luxempart (5,8%) y Cartesian (5%). Carolina Masaveu –de los Masaveu de toda la vida- posee el 3,7% de la compañía que compró el pasado mes de abril. Cierran la lista Iberfomento (3,3%), controlada por José Antonio Pérez-Nievas, Alfonso Paz Andrade (3%) y el fondo Fidelity (1%).
Claro que en este puzzle también juega un papel destacado la banca acreedora. Estamos hablando de Sabadell, NCG Banco, Caixabank y Popular.
Precisamente, tanto Sabadell como Caixabank imponen que sea Damm el nuevo propietario de la multinacional gallega. Pero al presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, no le gusta. No por nada, sino porque sabe que eso supondría, tarde o temprano, la deslocalización de la empresa. Al frente de Damm está Carceller cuyo socio principal es Oetker, multinacional alemana de la alimentación.
A todo esto, Carceller se ha buscado –y ha encontrado- otro apoyo: el de Carolina Masaveu. Efectivamente, los Masaveu, la gran fortuna asturiana, no son empresarios, son financieros que apuestan a largo plazo. Nunca se comprometen con la gestión para poder pedirle cuentas al gestor. Todo eso, claro está, mientras consigan solucionar sus querellas internas, que las tienen. Pero esa es otra historia.
El asunto es que, tal y como publica este viernes El Economista, Damm, Luxempart e Iberfomento, junto con Masaveu, apuestan por Juan Manuel Urgoiti como nuevo presidente de la compañía. Sin embargo, tras quebrar el Banco Gallego, Urgoiti no parece el más indicado para reflotar Pescanova.
Pablo Ferrer
pablo@hispanidad.com