Buen resumen el del equipo Tendencias, que lidera Carlos Díaz-Güell, sobre la nueva ley de cajas de ahorros.

 

Como ya hemos explicado, Hispanidad no está de acuerdo con el anteproyecto, porque cree en la continuidad de las cajas de ahorros, verdadero soporte accionarial de la industria española y entidades nacidas para combatir la usura bancaria. Con la nueva norma, las cajas desaparecen, se convierten en bancos y se deslocaliza la industria y el crédito, que es gravísimo.

Que sea un Gobierno socialista quien termine con las cajas de ahorros tampoco resulta muy difícil de entender: hablamos de un Zapaterismo convertido en progre-capitalismo, es decir, en un abajo los curas, arriba las faldas... y ya podemos forrarnos de dinero. La progresía nunca le ha hecho ascos a Wall Street.

Estamos, sin duda, ante una de las barbaridades legales más dañinas de los últimos tiempos, realizada por consenso, con el apoyo entusiasta del Partido Popular. Es el consenso de los idiotas o la conjura de los necios contra las cajas de ahorros. Nos cargamos las cajas, deslocalizamos el crédito y nuestra industria estratégica, terminamos con la obra benéfico social y premiamos al grande frente al pequeño y a la especulación bancaria frente a la banca doméstica. Sí, es la conjura de los necios, pero una conjura eutanásica, una conjura necia y suicida.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com