Ya no es posible no estar en China. El Santander lleva años dándole vueltas a la necesidad de entrar en el mercado. Tiene un problema: de toda su milenaria plantilla sólo una persona habla chino, una profesional de sucursal que en sus ratos libres presenta el informativo multilingüe de Telemadrid. Así lo señaló el consejero delegado Alfredo Sáenz, hace algunos años.
Así que entrar en el mercado con profesionales propios no era viable. La única alternativa es entrar de la mano de un socio local. Y para eso hay que fiarse de él. Por fin han encontrado un socio fiable. Adquirirán un 40% del capital para desarrollar conjuntamente el negocio.