A ello hay que sumar los 5 millones de parados, el aumento del umbral del riesgo de pobreza y las personas atendidas por Cáritas

 

La herencia zapateril se agranda. A escasos días de las elecciones generales, las estadísticas de pobreza en España van batiendo todos los récords. Hoy ha informado el Instituto Nacional de Estadística (INE) de que en el tercer trimestre del año ha aumentado un 23,5% -respecto al mismo periodo de 2010- el número de familias en quiebra, es decir, aquellas que no pueden hacer frente a sus deudas.
Y no es de extrañar, si tenemos en cuenta los recientes datos de la EPA -encuesta trimestral a las familias-, según los cuales, al finalizar septiembre, había en España 4.978.300 personas en paro, o sea, 403.600 parados más que un año antes. Y la tasa de paro alcanza el 21,52%, el más alto de la historia de España.
Asimismo, el INE informó recientemente de que el 21,8% de la población residente en España está por debajo del umbral de riesgo de pobreza, cuando en 2010 este porcentaje se situó en el 20,7%.
Igualmente, recordamos que Cáritas contó también hace escasas fechas en su Memoria de 2010 que las acciones desarrolladas el año pasado ascendieron a un total de 6.492.499 personas (un 4,3% más que en 2009); y puso de manifiesto en el 'Informe del Observatorio de la Realidad Social' que si en 2007 atendía a 400.000 personas, en 2010 atendió a 950.000.
E insistimos: detrás de estos datos y estadísticas, a veces un poco fríos, hay personas que lo están pasando muy mal. Por eso, urgen nuevas políticas que nos saquen de ésta, vengan de donde vengan.
José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com