Las empresas integrales de energía podrían ser la vía utilizada por el Gobierno Zapatero para modificar el mapa energético español y, de paso, a los presidentes de empresas energéticas. Vuelve a hablarse de las dos grandes empresas energéticas (producto de la fusión entre eléctricas y compañía de hidrocarburos): Endesa-Cepsa, Fenosa frente a Repsol YPF-Gas Natural-Iberdrola.
Y sí hay una razón económica que avala este planteamiento (aunque razones económicas siempre pueden encontrarse): petroleras y gasistas tienen más capitalización, más acceso a los mercados internacionales y más capacidad para las grandes inversiones y los grandes clientes. Sin embargo, no llegan al particular, cosa que sí hacen las eléctricas. Para cualquier tipo de desarrollo de infraestructuras, también de telecomunicaciones, tener clientes particulares es vital.