La eliminación de la Ley de Acompañamiento ha sido saludada como un ejercicio de transparencia que evitaría a futuro el abuso que se ha hecho de esta norma. No obstante, algunos observadores advierten que la eliminación de la Ley de Acompañamiento podría derivar en un decreto de acompañamiento, que ofrecería menores garantías al tratarse de una norma de rango inferior de iniciativa gubernamental, no parlamentaria.
Se vulneraría así el debate parlamentario, a pesar de que el decreto debiera de ser posteriormente convalidado por el Congreso. De momento, este viernes 8 se aprobará el decreto de tasas. Y no será el único. Desde Economía se defiende que este método da más transparencia al tenerse que debatir decreto a decreto. Además, sostienen que un decreto de tasas "no necesita debate parlamentario". El que tenga oídos para oír, que oiga.