• El teólogo explica a Hispanidad que uno de los retos del nuevo Papa será "presentar íntegro el mensaje del Evangelio de un modo atractivo y convincente para las personas del siglo XXI".
  • Lo cual requiere "un esfuerzo intelectual, pastoral y de comunicación serio".
  • Otro reto al que se enfrentará el nuevo Pontífice es el gobierno de la Iglesia: "La Iglesia es una institución muy compleja de gobernar, porque está todo enormemente disperso".
  • Y, el más importante, "el esfuerzo de profundizar en la santidad, tanto personal como tirar para arriba del nivel de santidad de los cristianos".
Con el nuevo cónclave a la vuelta de la esquina -cuando esto se escribe el Padre Federico Lombardi anunciaba que esta tarde se conocerá la fecha-, ya están en Roma los 115 cardenales electores, es decir, menores de 80 años, que se encerrarán en la Capilla Sixtina para elegir al nuevo Papa. Aunque pueden elegir a un cardenal no presente en el cónclave, o sea, mayor de 80 años; e incluso, jurídicamente, es posible elegir a un no cardenal.

Todo esto lo ha explicado a Hispanidad el teólogo y capellán mayor de la Universidad de Navarra, Francisco Varo. Le hemos preguntado por los que a su juicio son los principales retos que asumirá el próximo Papa en este momento: "El primero, el presentar el mensaje del Evangelio, manteniéndolo íntegro y con toda su verdad, pero a la vez de un modo atractivo y convincente para las personas del siglo XXI, en todas las culturas y ambientes". "Hay que estar continuamente renovándose en las formas para transmitir el mensaje, que es el mismo desde hace más de veinte siglos". Aunque eso requiere, a su juicio, "un esfuerzo intelectual, pastoral y de comunicación serio".

Porque, por otra parte, ha explicado el teólogo, "si uno mira a la sociedad ahora mismo, a diferencia de otros siglos pasados, no es una sociedad mayoritariamente cristiana, incluso en países de mayoría de cristianos o de católicos". "Las leyes y los modos de funcionamiento de la sociedad no son cristianos". "Es bastante el trabajo que hay que hacer en esa línea".

Otro ámbito de importancia al que va a tener que enfrentarse el nuevo Papa es el de la organización interna de la Iglesia: "La Iglesia es una institución muy compleja de gobernar, porque está todo enormemente disperso. Al cristiano normal lo que le llega es lo que oye a su párroco o en una ciudad o región al obispo". "Con la edad, el Papa se da cuenta de que hacen falta muchas energías porque hay que estar atento a muchos detalles".

A estos retos, Varo ha añadido un tercero, que es "perpetuo y fundamental, el reto de la santidad. La Iglesia no es una ONG ni una organización humanitaria que diga cosas bonitas o útiles a todo el mundo -aunque realmente las diga- sino que es un camino para ayudarnos a conocer los planes de Dios, seguirlos; lo que se podría decir es ser santos. Y todos estamos muy lejos. El esfuerzo de profundizar en la santidad, tanto personal como tirar para arriba del nivel de santidad de los cristianos es el primer gran reto".

Para todo ello, en su opinión, el perfil del nuevo Papa debe reunir estas características: "Santo, buen comunicador  -con capacidad de expresar y hacerse entender en el mundo actual ese mensaje permanente de la Iglesia-  y hombre de gobierno".

José Ángel Gutiérrez
joseangel@hispanidad.com