El mejor portal español sobre comunicación, PRnoticias, lo explica a las mil maravillas. Y hay que aplaudir a la FAPE por estos consejos a la prenda contra los abusos del poder político, el económico y el cultural. En efecto, una rueda de prensa sin preguntas es una contradicción. Y los enemigos de la libertad de prensa son muchos:

1. El que no convoca ruedas de prensa.

2. El que las convoca y no permite formular preguntas.

3. El que permite preguntas pero retira el micrófono para impedir repreguntar y no responde a lo que se le ha preguntado.

4. El que se enrolla durante una hora y luego permite dos preguntas.

5. El que hace ruedas de prensa restringidas a los medios "reconocidos", es decir, al lobby de colectivos periodísticos que le interesan.

6. El que convoca y permite preguntas pero con la condición de no citar la fuente. Así puede insultar a gusto a sus enemigos.

7. El que convoca para un asunto y prohíbe preguntar sobre el resto de temas que interesan (Maestro Rubalcaba).

8. El que lanza su proclamas pero no ofrece la documentación hasta terminada la rueda de prensa (especialidad del Consejo de Ministros en su rueda de prensa de los viernes).

Ahora mismo no se me ocurren más pero es cuestión de pensarlo.

9. El que emplea un filtrador de preguntas que "unifica las preguntas" para "agilizar" la rueda de prensa.

Eulogio López

eulogio@hispanidad.com