Sin embargo, el vicepresidente económico, Pedro Solbes, anunció hace dos meses que la reforma del impuesto de sociedades sería más un recorte de tipos que una rebaja del impuesto ¿Cómo encaja esta afirmación con la realizada por el Secretario de Estado de que lo servido sería superior a lo comido?, le pregunta Hispanidad. Y aquí es donde aparece nuestro don Pedro, siempre dispuesto a realizar ejercicio de cintura. Veamos. Por una parte, habrá una rebaja del tipo, su efecto será compensado por la corrección de las deducciones en un proceso que seguirá cierto paralelismo, aunque no total. Conclusión: Nos va a costar algo más el esfuerzo que las compensaciones. O sea, que costará algo, pero probablemente no los 2.000 millones de euros que el Gobierno ha vendido publicitariamente.
Por su parte, MAFO tuvo la oportunidad de sacarse la espinita, porque le preguntaron si en los datos de IVA presentados en la ejecución presupuestaria se incluía el impacto de la sentencia sobre el IVA. Solbes contestó que no, e inmediatamente MAFO le corrigió afirmando que sí se incluía, aunque el impacto era fácilmente digerible dado que el desempeño fue mucho mejor que lo presupuestado : 49.900 de cierre frente a los 47.600 presupuestados. Ya puestos, MAFO aprovechó para lanzar una puya a los populares: Nos dijeron que eran unos presupuestos voluntaristas y al final se ha demostrado que eran muy conservadores; este año, probablemente ocurra lo mismo.
Un último apunte: las reformas fiscales no irán al Consejo de Ministros de este viernes, pero sí antes de 15 días, apunta Solbes. ¿A que es divertido hablar con jeroglíficos? En esa reforma, de todo lo comentado en las últimas jornadas sólo se suprimirá el 40% de las deducciones por fondos de pensiones en caso de que la recuperación del capital sea en un único pago en lugar de un pago fraccionado. Este será el único cambio apunta MAFO, aunque en días pasados se mostró abierto a que pudieran incluirse nuevas modificaciones durante su tramitación parlamentaria.