No lo podemos confirmar, pero en los corrillos madrileños es lo que se comenta: Pedro Solbes ha presentado su dimisión al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, harto de que le ninguneen desde Ferraz (sede del Partido Socialista), desde Moncloa (donde opera Miguel Sebastián, azor económico del presidente del Gobierno) y desde los Ministerios de Industria y Fomento (sobre todo del primero).
El ninguneo de Solbes es especialmente destacable cuando se trata de política empresarial y de pactos con empresarios. Solbes fue ajeno al cese de Alfonso Cortina como presidente de Repsol y ha sido desde Industria desde donde se ha gestionado la carga de trabajo que Gas Natural le ha proporcionado a la factoría vasca de Astilleros Izar. De los ataques contra otros presidentes de empresas privatizadas puede decirse lo mismo: Solbes está fuera de juego.
Detalles como la privatización de un canal de RTVE y el reciente anuncio de endurecimiento fiscal para los planes de pensiones, desmentidas desde Moncloa, así como la negociación de los Presupuestos para 2005, y la tendencia de Moncloa a ceder ante los republicanos catalanes de ERC, han agotado la paciencia de Solbes.
En cualquier caso, y de hacer caso a las mismas fuentes, la presentación de su dimisión ha sido rechazada. Otra cosa es que el próximo mes de febrero, al rebufo del referéndum sobre