En los últimos años, el género del largometraje documental está proporcionando a los cinéfilos gratas sorpresas. Pueden comprobarlo con Spellbound (Al pie de
Bajo este título, el realizador Jeff Blitz nos presenta un film que tiene como eje el Nacional Spelling Bee un popular concurso estadounidense consistente en deletrear palabras al que concurren, cada año, nueve millones de escolares de aquel país. A la fase final, que se celebra en Washington y es retransmitida por televisión, acuden los muchachos seleccionados de todos los estados. Para muchos de los participantes (hijos de inmigrantes) el ganar el Nacional Spelling Bee es la forma de alcanzar el sueño americano.
Spellbound lo que narra, a modo de docudrama, es la vida de ocho de esos jóvenes participantes que compiten por el preciado título. Estudiantes de diferentes razas, religiones y culturas que hacen un esfuerzo titánico por conseguir un premio más relevante por su valor simbólico que por su importe económico.
Con un gran montaje que nos presenta a cada uno de esos escolares en su ambiente familiar, la película resulta tremendamente ágil gracias a multitud de anécdotas (el padre de la concursante mexicana no sabe hablar inglés a pesar de llevar veinte años en EEUU. Se encarga de cuidar ganado y como él mismo afirma ante la cámara: las vacas no hablan inglés).
La película, multipremiada en multitud de Festivales, llega a España con tres años de retraso y sólo se podrá ver en versión original subtitulada (de otra forma no tendría ningún sentido).