El pasado 13 de agosto el Gobierno aprobaba el RD que permitía que los parados que no tuvieran ningún tipo de prestación pudieran acceder a una renta de 420 euros. Pues bien, el comienzo de esta ayuda por parte del gobierno no ha podido ser más caótico. Según ha señalado el ministro Corbacho en la mañana de este jueves, 85.000 personas han sido informadas a través de carta o de SMS, pero a fecha de 26 de agosto, tan sólo han sido concedida esa ayuda a 5.000 personas. Parecen pocas teniendo en cuenta que el objetivo del Gobierno era alcanzar las 340.000.
El dato no hace sino evidenciar la chapuza de la medida. Primeros e anuncian que la memoria económica será de más de 300 millones, luego de 642; ahora de más de 800. Primero se anuncia que será retroactivo desde el 1 de agosto, pero a las 48 horas sale Zapatero afirmando que el corregible. Bueno, él dice mejorable. Y así, suma y sigue.
Los partidos nacionalistas recuerdan que las políticas activas de empleo son competencia de las CCAA y que el gobierno les ha colocado más responsabilidades sin darles financiación. Así que Corbacho recula y reconoce que sí, que se les pide un sobreesfuerzo para que las políticas puedan ser rentables en términos de reincorporación en el mercado de trabajo. Así que propone trabajar para que se pueda producir un adelanto del Fondo Social Europeo. En fin, chapuza sobre chapuza.