La empresa de Santander propiedad del inversor alemán Klaus Graff adquiere Lackey y Vitrogar

Son muchos los que habla de la crisis como oportunidad, pero pocos los que realmente parecen capaces de aprovechar la circunstancia. Por ejemplo, el Grupo Teka, propiedad del inversor alemán Klaus Graff, se ha hecho con el 100% del capital de las sociedades Lackey y Vitrogar, las principales empresas españolas dedicadas a la fabricación de hornos de cocina y aplicación de vitrificados sobre acero, respectivamente. La operación responde a la política de controlar todos los aspectos esenciales de su negocio principal consolidando el liderazgo de Teka en el sector cocina. Ambas empresas tienen una valoración superior a 30 millones de euros y emplean a más de 300 trabajadores.

Vitrogar, fundada en 1960, está especializada en la aplicación y revestimiento cerámico de hornos y placas vitrocerámicas, convirtiéndose en la primera compañía de Europa y en una de las líderes mundiales en investigación y desarrollo de esta tecnología. Más de la mitad de su producción se comercializa en cincuenta países.

Teka es un grupo multinacional nacido en Santander que emplea en la actualidad alrededor de 5.000 trabajadores en el mundo. El negocio del grupo industrial cubre desde equipamiento profesional y doméstico para la cocina y baño a contenedores de acero inoxidable, bombonas de gas, o barriles de cerveza, entre otros productos.