Sr. Director:
Las cadenas españolas ofertan sólo 'telebasura' Sr. Director: Las cadenas televisivas se presentan ante los telespectadores como una importante alternativa para una información más abierta, más libre y sobre todo realizada desde la pluralidad. La información de las cadenas de televisión representa una ventana abierta al mundo desde las distintas perspectivas que animan sus proyectos informativos. Pero la realidad, al menos en la parrilla española, no es esa; el sexo, la más atroz violencia y la más cruda realidad son los principales baluartes de los programas.
La competitividad no se ha basado en una programación seria y responsable, sino en atraer al público con unos contenidos banales, groseros, que están en la frontera de lo moralmente permisible. La aparición de la llamada telebasura, denominación acuñada en los Estados Unidos, donde se busca el crecimiento de la audiencia provocando directamente los instintos, las pasiones y los sentimientos de los televidentes, da cabida a todos estos temas. De esta forma una subcultura informativa llena los programas de la televisión norteamericana.
La publicidad es la financiadora de las cadenas de televisión, y es la principal expendedora de spots que invaden hasta el último resquicio de la conciencia de los hombres. Es necesario evitar la epidemia de erotismo, todo lo demás, desde la indiferencia hasta la permisividad, es algo inútil, que sólo sigue degradando al espectador, con un consumo masivo de televisión basura.
Clemente Ferrer Roselló
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