Vergonzosa la actuación del desconocido diputado del PP Teófilo de Luis (nacido en La Habana) la pasada semana en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso.
Arremetió duramente contra el Cardenal Ortega, de dicha ciudad, acusándole prácticamente de connivencia con el régimen castrista en el asunto de los disidentes cubanos excarcelados y enviados a España; de que había "forzado al destierro" a los opositores para que prosperara el plan de las autoridades de La Habana sobre excarcelaciones, como el propio Cardenal se lo habría confesado (¡¡¡); de actuar a título personal y no en nombre de la Iglesia cubana; y, en fin, de acudir a Bruselas como representante del régimen para que la UE suavizara la Posición Común sobre la Isla.
El cardenal, lógicamente, ha desmentido rotundamente esas aseveraciones del diputado español, asegurando que su intervención, junto con el cardenal Presidente de la Conferencia Episcopal cubana y otros prelados, fue exclusivamente humanitaria
Fernando Ferrín Calamita