Por supuesto, sería un primer paso para intentar hacerse con la compañía
El Gobierno español se opone. Si entra en Repsol, pondría en marcha el plan acordado con sus socios de Abu Dhabi: que IPIC se quede con Cepsa y los franceses con Repsol. Atención: Shell y BP también están interesadas en el paquete de Sacyr. Luis del Rivero se resiste a vender: preferiría que Abertis comprara Itinere, lo que liberaría más de 4.000 millones de euros, sólo que Florentino se niega. Empecemos por el final: la francesa Total quiere comprar el 20% de Repsol que obra en poder de la constructora Sacyr, pero lo tiene muy complejo. En primer lugar, porque ese paquete sería lo último que Luis del Rivero vendería en caso de necesidad (es su activo más preciado) y en segundo lugar por algo que parecen haber olvidado todo el mundo: Sacyr compró a 26 euros y ahora vale 20 euros. ¿PermitiráY no sólo Total quiere hacer con un paquete que pueda darle a medio plazo el control de Repsol, sino que Shell y BP -como ya hemos informado- también están interesados en Repsol, mientras el ministro de Industria Miguel Sebastián dice a quien quiere oírle que Repsol debe seguir siendo española y aconseja a Caixa y Sacyr que no vendan.
Ahora bien, la elevada deuda de la constructora exige poner a la venta parte de sus activos. El más lógico sería la concesionaria de autopistas Itinere, cuya OPV no salió como debía porque le cogió la crisis y nadie quiere participaciones que no sean de control.
Por eso, a través de intermediarios, ya ha habido contactos entre La Caixa y Sacyr para que fuera Abertis, quien adquiriera la concesionaria Itinere, que puede hacerlo, aunque anda de compras por la costa Este de de Estados Unidos. Ahora bien, aquí entra en danza, cómo no, Florentino Pérez, propietario de un 24,9% de Abertis y que, con tal de fastidiar a Del Rivero es capaz de muchas intrigas.
¿Que como podría Total ir a por la primera petrolera española cuando ya posee un 49% de la segunda, Cepsa? Pues esto enlaza con las negociaciones entre Santander y Fenosa para vender su paquete conjunto del 37% a Cepsa. Total no tendría inconveniente alguno en divorciarse de la autoridad inversora de Abu Dhabi, que ésta controlara la mayoría de Cepsa e incluso que se marchara del capital de la propia Total... con tal de poner un pié en Repsol.
Y todo esto antes de que las exploraciones en Brasil y México preludien una cotización al alza de Repsol. No sólo eso, se da la circunstancia de que el valor patrimonial de Repsol supera con mucho -en un 50%, según los cálculos de un intermediario incurso en la operación- su capitalización bursátil. Vender ahora, sería, en verdad, una gran tontería. Vender por encima de mercado podría despertar -¡quién sabe!- hasta el regulador bursátil.
Por cierto, Total está dispuesto a comprar todo lo que se ponga a la venta, el paquete por ejemplo, de Mutua. Y si llegan al 30%, lanzarían una OPA con mucho gusto.
España perdería así una de sus tres primeras empresas (junto a Telefónica e Iberdrola).