Ignacio Arsuaga de Hazteoir.org ha enviado la siguiente carta: El domingo 28 de diciembre, por la mañana, acudí al establecimiento Dator, el negocio abortista más importante de toda España.

Las personas concentradas, unas cien, nos reunimos, como cada año, con ocasión de la festividad de los Santos Inocentes, para defender el derecho a vivir y, este año, también para expresar nuestro rechazo al proyecto del Gobierno de establecer el aborto libre en España. Y nos sentamos a las puertas del matadero.

No me podía imaginar lo que iba a ver en pocos minutos. La policía, inopinadamente, pegó un bofetón a uno de los que estaban sentados en primera fila. Al cabo de un rato, un buen número de agentes antidisturbios de la Policía Nacional pegaba puñetazos, tortazos y empujones a los que se encontraban en primera fila.

Una chica fue abofeteada duramente, y tiene el labio partido, simplemente por sentarse a expresar su defensa del derecho a vivir y reclamar apoyo y alternativas para las mujeres embarazadas.

Al Dr. Jesús Poveda, presidente del Grupo Provida de Madrid, le colocaron boca abajo y dos agentes se pusieron encima suyo para esposarle. A continuación, le colocaron en una esquina, esposado, antes de meterle en una de las furgonetas de la policía.

Yo estaba, conmocionado, haciendo fotos de todo lo que ocurría. En ese momento, un policía me exigió que dejara de hacer fotos, que sólo podía hacer fotos si era de la prensa. A lo que le respondí que sí, que era de un medio de comunicación (HazteOir.org también es una publicación electrónica). Y seguí haciendo fotos, cuando se me acercaron tres energúmenos vestidos de policías, que agarraron mi cámara y tiraron de ella fuertemente. Y me hicieron daño en la muñeca (tenía la cámara sujeta con un cordón).

En ese momento perdí los nervios. Y me puse a gritar al policía que tenía en frente, que me respondió con un empujón y una amenaza. El momento lo recogió la cámara de TV de EFE y luego lo retransmitió la 1 de TVE.

Consciente de que iba a quedarse con mi cámara si me veía haciendo fotos, tuve que guardarla en mi mochila.

Pero no pudieron evitar que hiciera unas cuantas fotos que reflejan la desproporcionada violencia de la Policía.

De esta forma, la Policía antidisturbios ha vuelto a protagonizar, bajo el mando de la Delegada del Gobierno en Madrid, Soledad Mestre, un nuevo atentado a la libertad de expresión y de manifestación, con una respuesta desproporcionada en un Estado que se dice de Derecho.

Clemente Ferrer Roselló

clementeferrer@yahoo.es