La reforma laboral del Gobierno Zapatero no ha servido para mucho, más bien para nada, a tenor de la evolución del paro desde que entró en vigor. Pero es que esa reforma no toca, para nada, el problema del absentismo laboral, ni su coste fiscal ni la pérdida de competitividad que provoca en la empresa.
El absentismo sí es un problema real la economía española, aún en periodo de crisis. Lo de la crisis bancaria es una coña marinera que sólo se arregla dejando quebrar a los malos banqueros y asegurando los depósitos -que no las inversiones- de los clientes.
Eulogio López
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