Pero, sobre todo, es una gilipollez enorme.
Es que las cosas están tan mal que no hay famosos que sean coherentes con los principios católicos. Pues entonces no des premios o hagas famoso con esos premios a quien no es coherente con tus propios principios.
Pero, sobre todo, eres un poco gilipollas
Pero si premio a un famoso también me hago yo famoso. Claro, pero ese no es el objetivo de un católico, ¿verdad Eulogio López
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