Aquellos que han mostrado un interés por mantener su estatus y modus vivendi en vez de defender los derechos de aquellos a los que dicen representar (sindicatos de clase) han organizado un huelga de metro durante los mismo días de celebración de la JMJ en Madrid.En cambio la ONCE ha puesto a disposición de la JMJ las 802 plazas de que dispone su centro deportivo y cultural del madrileño paseo de La Habana, para alojar a 672 peregrinos franceses -de los que 622 son personas con discapacidad y sus acompañantes-, y a 50 voluntarios de la Orden de Malta.
Esto permite que la JMJ de Madrid será la primera accesible para los peregrinos con discapacidad, gracias a un convenio firmado entre la ONCE y el comité organizador de la JMJ. Como resultado de este acuerdo, la ONCE atenderá y acompañará a los cinco mil peregrinos con discapacidad que se prevé van a asistir a la JMJ.
Sin duda es un contraste entre los que buscan servir y los que buscan servirse. Mi felicitación a la Organización de la JMJ y a la ONCE y mi repulsa a esos sindicatos que siguen llamándose de clase y actuando como los de los viejos tiempos hasta cuando no hay clases.
José Morales