Zelaya da por roto el acuerdo de San José y arremete contra Estados Unidos por reconocer las elecciones del 29 de noviembre. Se ha terminado creyendo lo que le dijo Chávez: eres el garante de la democracia en Latinoamérica. Ahora lo que señala es que sigue aspirando a la restitución, pero sin acuerdo de San José. O sea, sin armadura legal.
Y es que el acuerdo de San José está en vía muerta porque el Partido Nacional, en quien él confiaba, no piensa dar su apoyo a su regreso. Y no lo va a hacer porque unas encuestas internas revelan que perderían un 22% del electorado. Actualmente, Pepe Lobo va por delante en las encuestas respecto a su inmediato rival, el liberal Elvin Santos. Si Lobo hace una tontería puede perder la presidencia de la república, su principal y única aspiración. Así que no se va a mover. Y si no se mueve, el Congreso no aprobará el regreso de Zelaya. Si a eso le sumamos que Estados Unidos 'bendice' el proceso electoral, entendemos perfectamente que Zelaya esté que se sube por las paredes, con declaraciones descoordinadas y contradictorias.
Pero Honduras se manifiesta firme en el proceso electoral. Son una democracia y tendrán elecciones limpias, garantizadas por observadores internacionales. Y que gane el mejor.