El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero ha presentado la dimisión de su cargo, aunque permanecerá como diputado de base en el Congreso. Por sorpresa, y en un ejercicio de autocrítica, el jefe del Ejecutivo ha reconocido su incapacidad para gestionar la crisis económica, que ha golpeado a España más que a ningún otro país de Europa, con un paro creciente, hasta caer en la parálisis.
Al mismo tiempo, el popular Alberto Ruiz Gallardón, acaba de anunciar que se retira de la vida pública en reconocimiento de su lamentable contribución a la división del Partido Popular y, lo que es más importante, por haber convertido a Madrid en la capital europea más endeudada y en la ciudad más apalancada de España.
En su renuncia a la vida pública, Gallardón ha pedido perdón por haber usurpado la patria potestad a los padres con el reparto de píldoras abortivas a menores de 13 años en adelante, en los centros municipales, a espaldas de sus padres, aumentando la promiscuidad en el municipio madrileño hasta cimas nunca logradas.
Ambos políticos han querido dar un ejemplo a los futuros servidores de los ciudadanos.
Respecto a don Mariano Rajoy, jefe del a oposición, no ha presentado su dimisión, al no haberse enterado de las dos anteriores: ¡Carallo!