Acuerdo para gobernar la comunidad autónoma valenciana entre el Partido Popular y Vox. Pero, ojo, prescindiendo del cabeza de lista del partido de Abascal, el repudiado Carlos Flores... al que don Santiago dará cabida en las listas para las generales: número 1 por Valencia al Congreso.
De esta forma, el donostiarra moderno, don Borja Semper, que ayer anatemizó a Flores, es políticamente correcto, pueda ahora presumir de haber ganado una batalla al machismo ultra. Sí, Semper es capaz de eso y de mucho más. Probablemente, el pacto ya había sido acordado y don Borja utilizó la misma táctica de Miguel Roca en la Transición: cuando por fin llegaba a un acuerdo con otra fuerza política salía a hablar con los periodistas y bramaba: si antes del próximo lunes no se aceptan nuestras condiciones, me voy.
Vox es el único partido parlamentario que cree en la inteligencia de las mujeres: por eso las considera capaces de ejercer violencia psicológica
Pues bien, Abascal ha cedido a las exigencias del PP y ha enviado a Carlos Flores de Valencia a Madrid: figurará en las listas de Vox al Congreso. Así, la Generalitat Valenciana estará dirigida por el pepero Carlos Mazón, quien sustituye a Ximo Puig. Vox ha cedido en que Flores quede fuera del Gobierno autonómico.
Para entendernos, Carlos Flores se ha convertido en una soflama para los socio-podemitas, engolosinados con la ideología de género.
Atención: Carlos Flores fue condenado hace 21 años, sí 21 años, no por maltratar a su mujer, no por pegarle, sino por ejercer sobre ella 'violencia psicológica' ese invento chicle que da para mucho y que se supone que sólo practicamos los varones. Las mujeres, jamás de los jamases.
De lo que hay que deducir que, para la ideología de género las mujeres son idiotas, porque, naturalmente si se trata de fuerza bruta el hombre siempre lleva las de ganar pero si se trata de fuerza psicológica, intelectual... la mujer puede ejercerla con tanto virtuosismo, o más, que el varón. Sin embargo, para las feministas la mujer nunca ejerce violencia, sólo el hombre.
Para el Gobierno sociopodemita -menudo numerito ha montado la ministra de Educación, Pilar Alegría- lo peor es que Vox niega la violencia machista. Vox nunca ha hecho eso: lo que niega Vox es que solo el varón ejerza violencia. Al parecer, Vox es el único partido parlamentario que cree en la inteligencia de las mujeres.
Abascal: se puede ceder en todo con tal de echar a Sánchez... salvo en los principios.
Ahora bien, el pacto entre PP y Vox sólo será bueno, en Valencia y en cualquier otro lugar, si Vox no cede en sus presupuestos clave: derecho a la vida, desde la concepción hasta la muerte natural, familia natural, un padre y una madre abiertos a la vida, y libertad de enseñanza. Al tiempo, una mera justicia social, con respeto a la propiedad privada, a la libertad religiosa y a la reconciliación de España. Y si cede en eso, la experiencia de Vox no habrá servido para nada.
Ahora está pactando comunidades y ayuntamientos: será mejor que lo haga bien. En Valencia ya ha cedido demasiado. Porque se puede ceder en todo para echar a Sánchez, salvo en los principios.