A la ministra, digo, no a la locutora. Dos asuntos preocupan a una de las ministras más próximas a Mariano Rajoy: AENA y el AVE a La Meca. Es difícil presumir de buena privatización en AENA cuando la vendes por el doble del primer cálculo y luego sube un 65% en bolsa. No, no cuela: se malvendió. Y ahora, en plena recta de salida, lo peor, en el concurso del AVE La Meca Medina se está armando una muy gorda. Es decir, el concurso liderado por RENFE y Adif. Lo que ha salido en la prensa es lo de menos. Las diferencias entre lo presupuestado y el coste final van a ser muy peligrosas. Sí, los árabes tienen su parte de culpa. Son moros ricos pero igualmente veleidosos. Y resulta que ahora piden más de lo que en su día aceptaron firmar. Ahora bien, no se puede hacer un consorcio de doce empresas, son demasiadas. La bronca entre las empresas españolas han sido muchas y eso no ayuda a entenderse con el de enfrente. Y ahora, encima, Ana Pastor (en la imagen) no tiene fuerza como interlocutor ante el Gobierno de Riad. Sencillamente, es una ministra saliente. Bueno, creo, porque al paso que vamos… Hispanidad redaccion@hispanidad.com