El objetivo de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) es velar por la transparencia del mercado de valores y proteger a los inversores. No descubrimos nada si decimos que el primer paso para garantizar estos objetivos es tener acceso a la información de las empresas cotizadas. A más informacion, más transparencia. Lógico.
El presidente de la CNMV, Sebastián Albella, sin embargo, no piensa lo mismo, o tiene otros objetivos distintos a los de la institución que preside. En plata, quiere que las empresas cotizadas publiquen resultados cada seis meses y no cada trimestre, como hacen ahora. La excusa, que España es el único país que obliga a ello y, claro, tanta transparencia no es buena. Lo reconoce el propio Albella: “Me parece muy bien que se publiquen pero resulta raro que seamos el único país que lo hace y esto puede hacer que nuestro mercado sea menos atractivo”, señaló el lunes, en la inauguración de la Convención de la Asociación de Mercados Financieros celebrada en Madrid.
Hay que seguir el ejemplo de otros países como, por ejemplo, Irlanda, que es un semi paraíso fiscal... y que solo exige resultados semestrales. Eso si, en Irlanda se habla en inglés.