Alfonso Guerra es un tipo inteligente y lo demuestra en su entrevista en El Mundo. Pero todo su intelecto se pierde en un océano de mala leche y de un ingente ego.
Y así, Guerra insiste en que hay que establecer un cordón sanitario frente a Vox y frente a los independentistas.
¿Y no frente al marxismo del que procese el PSOE?