Incapaz el PP de hablar de la patria española, sino de constitucional, democracia, etc. Que no es eso, ni tan siquiera la democracia. Es patria española. Mientras, ellos sí hablan de patria catalana. Ya saben, los del muftí de El Cario: En 50 años vuestras mujeres vestirán chilaba, porque nosotros creemos en algo y vosotros no creéis en nada. En efecto, ¿en qué cree Pedro Sánchez cuando establece equidistancias entre el PP y la CUP? ¿En qué cree Pablo Iglesias (ambos en la imagen) cuando tiene el cinismo de hablar de España, eso sí, como país de países, nación de naciones y no se sabe cuántas chorradas más? ¿En qué cree Mariano Rajoy, en su día afiliado al grito de "cuando llueve escampa" y en qué cree su portavoz, Méndez de Vigo, cuando invoca la Constitución de 1812 (por cierto, ¿sabe que ese texto era confesional católico?) y al señor Rousseau para oponerse a la independencia de Cataluña? Porque son esos son todos los argumentos del PP. Los independentistas creen en la quimera de la República catalana. Incluso si no lo creen posible están dispuestos a montar el follón por ello. Ahora el PP debe preguntarse en qué cree. Y Sánchez e Iglesias deben preguntarse cuál es el límite con tal de obtener el poder. Hispanidad redaccion@hispanidad.com