Xi Jinping, declaró oficialmente que el país ha concluido su “ardua tarea” de erradicar la pobreza extrema y afirmó que 98,99 millones de personas han salido de la misma en los últimos ocho años. “Hoy declaramos solemnemente (...) un completo éxito en la lucha contra la pobreza en país”, dijo el presidente en una ceremonia en el Gran Palacio del Pueblo de Pekín ante miles de delegados que llenaban el auditorio. Todos ellos enfervorizados.
Tal como publica La Razón, según el presidente la erradicación de la pobreza extrema ha sido posible con “un enfoque realista y pragmático” y gracias a “las ventajas políticas del sistema socialista, que puede agrupar los recursos necesarios para emprender grandes tareas”. China ha invertido en los últimos ocho años cerca de 1,6 billones de yuanes (202.000 millones de euros, 246.000 millones de dólares) en la lucha contra la pobreza, dijo Xi.
En el programa han trabajado en las zonas rurales del país cerca de tres millones de personas. China situó en 2019 el umbral de la pobreza extrema en 4.000 yuanes al año, lo que representa 1,6 dólares al día ( 1,3 euros) mientras que el establecido por el Banco Mundial en 2015 es de 1,9 dólares al día ( 1,5 euros). Según los responsables de la Oficina de Reducción de la Pobreza china, el umbral del país calculado en poder adquisitivo real supone 2,2 dólares por día ( 1,8 euros).
Por cierto, que el mandatario chino -según publica infobae- ha ordenado avanzar por completo con los restos de democracia que aún sobreviven en Hong Kong. Es por eso que instruyó a sus delegados a completar la misión encomendada. El jefe de la Oficina de Asuntos para Hong Kong y Macao, Xia Baolong, ha anunciado este lunes que el régimen chino tiene prevista la puesta en marcha de un plan para garantizar que “solo los patriotas” están al frente de la región administrativa especial china. En un discurso, Baolong ha señalado que “la labor más vital para lograr el gobierno de los patriotas es implementar sistemas relevantes, particularmente en lo referente a lo electoral”. “Ser patriota significa amar China”.
El modelo es "un país, dos sistemas", tiranía comunista y economía capitalista. Tres concreciones:
1.Si no acaba con la pobreza acaba con los pobres, entre otras vías por la política del hijo único.
2.Se exporta de todo con artículos baratos porque están producidos con salarios de miseria y en condiciones de semiesclavitud. No se importa nada que no resulte estrictamente necesario. Es decir, que crea empleo en China y lo destruye fuera.
3.Nadie protesta o sera laminado.
Un sistema muy eficiente.